En plena pandemia del COVID-19, el presidente de la República, Mario Abdo Benítez, habría destinado casi 3 millones de dólares –sin contar el mobiliario– a un proyecto personal: el de replicar en Lambaré el lujoso rancho Neverland del rey del pop, Michael Jackson.

Una de las casas de la propiedad conocida como la Quinta Bo, ubicada sobre la avenida Félix Bogado de Asunción, perteneciente a la familia de la primera dama, donde vivía anteriormente el presidente de la República con su familia antes de llegar al poder, fue refaccionada en plena pandemia y demandó una inversión de casi 3 millones de dólares, según datos arrojados por arquitectos consultados por “La caja negra” a partir de fotografías de lo que anteriormente era la residencia y de cómo quedó en la actualidad.

Una imponente vista aérea capturada por el equipo periodístico muestra lo que es la reformada y ampliada mansión de la familia presidencial, la cual incluso está equipada con un helipuerto.

En ese terreno ya estaba construida una casa con piscina en el 2003 y luego se le agregó un módulo en el sector sur en el año 2013. Para ampliarla aún más se hicieron posteriores obras de reforma y otras complementarias.

Al hacer el desglose de la edificación, se observa que se ejecutaron obras nuevas con un costo aproximado que estaría en torno a los 900 dólares el metro cuadrado, y reformas que tendrían un estimativo de 600 dólares por metro cuadrado, de acuerdo a consultas hechas a expertos en el área de la construcción.

Es así que la reforma de la casa que ya estaba instalada en ese lugar habría tenido un costo aproximado de casi un millón y medio dólares, la casa adicional más pequeña costaría unos 241.872 dólares, las obras en el acceso principal, hall y sala doble de altura habrían demandado la suma de 335.808 dólares, un nuevo mirador habría sido instalado por unos 111.168 dólares y el reacondicionamiento total de la piscina habría costado 58.800 dólares. Sumando todas las mejoras hechas, se obtiene la suma de 2.213.496 dólares.

Pero esto no es todo, aún queda pendiente equipar la residencia con materiales de alta gama, todo sea por cumplir con el proyecto de ensueño, el de replicar todos los detalles del conocido rancho Neverland, el cual fue un producto de la fantasía del rey del pop, el artista Michael Jackson.

El músico era conocido por sus excentricidades y una de ellas era el rancho de Neverland, o dicho en español El País de Nunca Jamás, recordando la historia de Peter Pan. Copiando este estilo, ahora el presidente Abdo Benítez pretendería tener su propia mansión al nivel peculiar y extravagante de Michael Jackson.

Para ello no tuvo mejor momento que hacerlo en plena pandemia del COVID-19. Según imágenes satelitales a las cuales accedió “La caja negra”, se observa que las nuevas mejoras se iniciaron entre octubre y noviembre del 2019, cuando Marito llevaba un año en el poder. Luego las labores se intensificaron pese a la llegada del coronavirus al Paraguay. En los sucesivos meses la edificación avanzó a toda marcha, culminando la obra en marzo del año pasado.

Mientras el mandatario está abocado a su majestuoso proyecto personal, la ciudadanía exige saber dónde están los 1.600 millones de dólares del préstamo adquirido para el combate al virus. Ante la desidia de las autoridades en brindar una respuesta sanitaria oportuna y eficiente, la cual derivó en miles de muertes de compatriotas, todo hace sospechar que el dinero de la pandemia en realidad fue a parar a otro lado. Y la casa que fue renovada por Marito no hace más que generar una mayor suspicacia.

Según imágenes satelitales a las cuales accedió "La caja negra", se observa que las nuevas mejoras se iniciaron entre octubre y noviembre del 2019, cuando Marito llevaba un año en el poder. Foto: Gentileza.

La pandemia

La pandemia del COVID-19 generó un tremendo impacto en nuestro país, afectando no solo a la salud de la población, sino también a la ocupación laboral. De acuerdo al Observatorio Laboral del Ministerio de Trabajo, actualmente hay 242.000 compatriotas desempleados.

Desde el inicio de la pandemia el pago por suspensión de contratos laborales llegó a 102.848 trabajadores, por aislamiento preventivo por COVID a 86.046, a grupo considerado de riesgo se benefició a 1.859 y con el pago por reposo por COVID fueron beneficiados 24.174 trabajadores. En total, 214.927 cobraron conjuntamente 609.275 millones de guaraníes del IPS durante este tiempo.

A la par que los gobernantes y empresarios inescrupulosos negociaban las compras COVID y se llenaban de dinero sus bolsillos, la ciudadanía se empobrecía cada vez más y veía la forma de aguantar, ya sea reduciendo sus gastos o recurriendo a las ayudas solidarias, como las ollas populares. Tampoco faltaron los desesperados pedidos de auxilios de los familiares que no podían costear los caros medicamentos que estaban en falta en los centros hospitalarios para el tratamiento de los pacientes con COVID.

A la terrible situación económica se sumó el agravante de las miles de pérdidas humanas. Familias enlutadas por la desidia del Gobierno siendo que con una vacunación anti-COVID oportuna unas 10 mil muertes se pudieron haber evitado. Sin embargo, las autoridades estuvieron ocupadas en otros asuntos antes que atender la problemática que terminó arrasando con todo.

Por JORGE TORRES, LA CAJA NEGRA, UNICANAL

 

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí