Una colección audaz y completamente arrebatadora, llena de piezas llamativas del director creativo Wes Gordon, inspiradas en la mujer Herrera segura de sí misma, fuerte y llena de fuego.
“Nuestra cliente busca piezas que celebren el momento. Quiere el asombro de Herrera: vivir el momento, vestirse”, señaló el director. Las siluetas son marcadamente lineales y entalladas, pero presentan momentos de exuberancia como una cascada ondulante, una manga enorme o una revelación de color en un dobladillo.
Las formas de los corpiños se cortan con precisión y sensualidad, y se reinterpretan como prendas frescas o un atrevido flequillo de pedrería. Una paleta de colores de Crushed Berries, Anemone Blue, Fire Opal, Deep Peony, Evening Primrose Yellow y Dahlia contrasta con tonos de blanco y negro.
Las telas incluyen denim índigo intenso, muaré de seda, tafetán y faldas crujientes, camisería de algodón de la firma Herrera, prendas de punto bordadas con hilo y lentejuelas, además de un brocado de lurex con lirios florecientes.
La colección de Gordon es característicamente optimista, inyectándole una racha realmente divertida. Para empezar, hubo guiños a la Sra. Herrera: una blusa, una chaqueta y un vestido de abrigo, todos con el tipo de mangas amplias dramáticas que ella prefería. Lo que Vogue describe como “haberse especializado en una especie de grandeza práctica”.
¿Cuáles son tus preferidos?
VOS