El 20 de enero de 1933, a las 08:30 hs la artillería boliviana abrió un violento bombardeo de preparación durante 10 minutos sobre las posiciones de Nanawa de los frentes oeste y norte, acentuandose en la Isla Mojoli, llamado más tarde Isla Capitán Cristaldo, seguido de un ataque con 6000 hombres de las tropas del Coronel Jacinto Reque Teran.
Cuando llegaron a 100 o 150 metros de la posiciones paraguayas, accionaron al unísono las armas automáticas con su bien distribuido y mortífero fuego, que contuvo y repelió en forma sucesiva el ataque con grandes y sangrientas pérdidas, y en la misma forma e igual costo, el segundo y tercer ataque.
Simultáneamente a dichos ataques, las tropas del Coronel Enrique Frías avanzaban del lado sur, y luego de una intensa preparación de artillería, atacaron con furia inaudita a las 18:30 hs, siendo frenados y rechazados con fuertes bajas. El día 23 el destacamento Julio Quiroga, que tenía la misión de aferrar en el frente oeste de las posiciones paraguayas, intentó tomar el antiguo fortín Nanawa, muriendo en la acción el mayor Alberto Valdez y numerosos soldados.
El 24 de enero, a las 6, tropas del RIB 41 al mando del mayor René Pantoja del destacamento Frías, cumpliendo instrucciones personales del general Kundt, iniciaron el ataque envolvente por el flanco sur, logrando rodear las posiciones de Nanawa.
El teniente coronel Irrazabal ordenó contraatacar inmediatamente al 1° y 2° escuadrones del RC 5 «Acá Verá» que enfrentaron a los bolivianos a machetazos, hicieron volar cabezas y brazos con admirable rapidez y una bravura endiablada teniendo que huir presurosamente los soldados de la unidad boliviana ante el peligro de ser aniquilados.
El balance final de la batalla fue para los bolivianos de aproximadamente 2.000 bajas y 248 para los paraguayos.
Fuente: La Guerra del Chaco 1932 -1935. Gral. Hugo Mendoza